Equilibrio en mí mism@

Siento una fuerza que lo mismo unas veces me empuja hacia la hiperactividad, como otras todo lo contrario y me ralentiza hasta casi pararme por completo. Resulta algo confuso según como la perciba.

Si la escucho fuera de mi esto es lo que me dice: «Háztelo tu mismo» y es entonces cuando empiezo con la autoexigencia, con el superrendimiento, digo SÍ a todo y no puedo parar. Termino agotado, cansado, estresado y comiendo sin parar.

En cambio, cuando la escucho dentro de mí, el mensaje es: «Sé tú mismo» y entonces mi actitud es radicalmente distinta: me paro a observar y contemplar, dejando que todo lo que me rodea se acerque a mis ojos. Todo se ralentiza e incluso hasta se para. No tengo ese cansancio agotador, es más bien un descanso, porque no hay esa hiperactividad y digo NO a algunas cosas y tampoco me da por comer.

Me pregunto: ¿se trata de la misma fuerza?; ¿se trata de la misma energía y soy yo el que, dependiendo desde qué perspectiva escuche, actúo de una u otra forma? He llegado a la conclusión de que es así. No me aceleran, ni me activan, ni me estresan los demás o aquello que me rodea. Tampoco me frenan, ni me ralentizan, ni me bloquean. Soy Yo mismo el que lo hago de una u otra forma cuando siento esa fuerza en mi. Evidentemente no hay dos mensajes diferentes, sino uno solo y bien concreto:

«Yo mismo»

Y dependiendo de dónde (aquí) y cuándo (ahora) yo decido la acción: SER/HACER YO MISMO.

Y cuando desde esa fuerza actúo equilibrando ambas acciones (ser/hacer), entonces soy y cuando soy, entonces hago. Al HACER desde el SER, no me acelero, ni me estreso, ni me agoto y tampoco me quedo parado y es entonces cuando puedo fluir con la vida.

Ángel

 

Relacionados
Ángelus: codificando y descodificando un mensaje

No soy escritor, aunque curiosamente he podido experimentar lo que se siente escribiendo un libro. En cierta manera ha sido algo parecido a lo que podría sucederle a un labrador que, al sembrar su bancal descubre, escondidos y enterrados en él, los restos diseminados de una vasija milenaria. Aunque nuestro labrador no es arqueólogo, descubre […]

La experiencia del ego

El hecho de que la realidad tenga una parte aparente y manifestada y otra parte oculta, conlleva el hecho de que tengas que pasar siempre por la parte aparente para acceder a la parte oculta, ya que es así como funciona el lenguaje del mundo terreno en el que te desenvuelves. Por ejemplo, a través […]

Deja un comentario